Estados Unidos ha sido epicentro de muchos éxitos, de grandes inventos, es el país soñado de algunos y el no deseado de pocos, pero a pesar de todas las cosas buenas que ha vivido esta nación hermosa, también le ha tocado vivir ataques, guerras y desgracias.
Han pasado 20 años de aquel fatídico día, 20 años de los ataques más horribles que he visto en mi vida.
El 11 de septiembre del 2001 marcó mi vida para siempre, recuerdo exactamente dónde estaba y cómo me sentí al ver desplomarse la primera torre, algo que me dejó impactada que hasta el día de hoy no lo olvido.
¿Qué estaba haciendo cuando sucedió la tragedia?
Estaba en el trabajo donde laboraba como secretaria en una oficina médica y al llegar había confusión, cuando llegué vi la primera torre en llamas, después vi el segundo avión en la segunda torre.
Todos los televisores estaban mostrando ese momento tan desagradable y triste, recordarlo causa conmoción.
Muchas personas lloraban al salir y otras se lanzaban de los edificios, (en acto de desesperación y lo peor que vi), ver eso dejaba a cualquiera en shock, aterrado, sin aire, conmovido.
El Doctor dijo “estamos en Guerra” y luego salió el presidente George Bush a ofrecer declaraciones y afirmó exactamente lo mismo en su discurso, ese debió haber sido el peor día de su vida, su cara lucía pálida y con mucho susto, no hubiese querido estar en sus zapatos.
Asimismo, recuerdo que el Doctor dijo a todos “vámonos a casa a abrazar a nuestras familias y a orar porque todo esto pase”. Fue unos de los momentos que sentí que todos aquí en los Estados Unidos estábamos unidos bajo el mismo sentimiento de dolor.
No cabe duda que, ese día marcó la vida para miles de familias que perdieron seres queridos, que iban a hacer lo que les correspondía ese día: trabajar para mantener a sus familias y en busca de mejorar sus vidas.
Se me hace un nudo en la garganta pensar en eso, en que muchos no llegaron a sus casas, que no volverán a ver a los suyos, que sus sueños y metas se interrumpieron para siempre
Reflexión
Hoy más que nunca debemos recordar ese momento, ya que nuestro país está muy dividido, debemos recordar que somos más fuertes juntos y que todos somos seres humanos con las mismas necesidades. Honremos a los caídos respetándonos unos a los otros y recordemos que unidos somos más fuertes. Amemos, abracemos, vivamos cada segundo y momento, disfrutemos.
He leído muchas historias sobre ese día, todas impresionantes (claro está), unas inspiradoras y otras lamentables. Y hoy les quise contar mi historia.¿Qué estuviste haciendo aquel 11 de septiembre? Si lo recuerdas déjamelo en los comentarios.